... y la ciudad va subiendo, y el cielo se va tapando y sólo aparecen algunos retazos de nubes, un sol adivinado entre ladrillos y ventanas. Los edificios crecen, hormigueros de cemento que se van comiendo los barrios. Cuándo será el día que caigan por su propio peso, en qué momento será que tanto hormigón inconsciente finalmente se hunda, absorbido por la oscuridad de un cielo negro de noche.
martes, 13 de julio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario